Jueves 23 de Mayo de 2024
Séptima Semana en Tiempo Ordinario
PROTEGER A LOS DÉBILES
Oración Colecta
Señor Dios, Padre nuestro,
Jesús, tu Hijo,
mostró una especial preocupación
por los débiles y los humildes.
Ayúdanos también a nosotros
a no ser nunca prepotentes
o condescendientes con los pequeños.
No permitas que los confundamos
con palabras acomplejadas y eruditas.
Y danos una fe informada,
pero sencilla y confiada.
Te lo pedimos en nombre de Jesús, el Señor.
Primera Lectura: Santiago 5,1-6: El jornal defraudado a los obreros ha llegado hasta el oído del Señor
Santiago recurre a las vehementes invectivas de los profetas contra los ricos que explotan a los pobres, aunque en las primeras comunidades cristianas debía haber pocos ricos de verdad.
Salmo 49: Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos
Evangelio: Mc 9,41-50
Jesús muestra preocupación por los "pequeños", es decir, por los cristianos corrientes no demasiado versados en cuestiones doctrinales, que a veces son confundidos por los más doctos.
Mc 9,40-49: Tengan sal y estén en paz
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Todo aquel que les dé a beber un vaso de agua por el hecho de que son de Cristo, les aseguro que no se quedará sin recompensa.
Al que sea ocasión de pecado para esta gente sencilla que cree en mí, más le valdría que le pusieran al cuello una de esas enormes piedras de molino y lo arrojaran al mar.
Si tu mano te es ocasión de pecado, córtatela; pues más te vale entrar manco en la vida eterna, que ir con tus dos manos al lugar de castigo, al fuego que no se apaga. Y si tu pie te es ocasión de pecado, córtatelo; pues más te vale entrar cojo en la vida eterna, que con tus dos pies ser arrojado al lugar de castigo. Y si tu ojo te es ocasión de pecado, sácatelo; pues más te vale entrar tuerto en el Reino de Dios, que ser arrojado con tus dos ojos al lugar de castigo, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.
Todos serán salados con fuego. La sal es cosa buena; pero si pierde su sabor, ¿con qué se lo volverán a dar? Tengan sal en ustedes y tengan paz los unos con los otros".
Oración de los Fieles
Oración sobre las Ofrendas
Dios Padre nuestro,
tu Hijo Jesús fue radical
en su amor y en las exigencias
que hizo a sus discípulos,
pero fue suave y comprensivo
con los débiles y los pobres.
Con este pan y este vino,
acepta nuestro propósito
de seguir a tu Hijo
en su radicalidad y exigencia.
Pero sé también compasivo
y perdona cuando no cumplimos
nuestras mejores intenciones.
Y ayúdanos a tener paciencia con los demás,
y con nosotros mismos
a causa de Jesucristo, nuestro Señor.
Oración después de la Comunión
Dios paciente y misericordioso,
hemos escuchado a tu Hijo hablarnos
palabras de advertencia y una llamada
a la conversión.
Haz que superemos
las pruebas de la vida cristiana,
para que nunca nos condenemos.
Haz que esta Eucaristía enfervorice
nuestros corazones y nos mantenga
en paz entre nosotros y contigo,
nuestro Dios compasivo y paciente.
Te lo pedimos por Cristo, nuestro Señor.
Bendición
Nunca mires a los demás por encima del hombro. Protégelos. Jesús lo repite de muchas maneras respecto a los marginados y pecadores, respecto a los niños, respecto a los débiles y a la gente sencilla. Dios nos ama a todos. Que Dios te bendiga, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.