Miércoles 9 de Abril, 2025
Quinta Semana de Cuaresma
“LA VERDAD LOS HARÁ LIBRES”
Oración Colecta
Señor Dios nuestro:
Tú nos llamas a ser libres.
Ayúdanos a darte siempre
una respuesta de libertad.
Ya que la palabra salvadora
y la muerte liberadora de Cristo
nos han hecho libres,
que nunca de nuevo
nos atemos con cadenas
fabricadas por nosotros mismos,
cadenas de pecado egoísta
y de falsos apegos mundanos.
Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor.
Primera Lectura: Daniel 3,14-20.24.28: Envió un ángel a salvarlos
La significativa historia de los tres jóvenes que, por mantenerse fieles al Señor, fueron condenados al martirio y, por su fe, fueron salvos, nos mueve a meditar sobre nuestra propia fidelidad a Dios. ¿Le ofrecemos nuestras vidas como un canto de alabanza?
En aquellos días el rey Nabucodonosor dijo: 14¿Es cierto, Sidrac, Misac y Abed-Nego, que no respetan a mis dioses ni adoran la estatua que he mandado levantar? 15Miren: si al oír tocar la trompeta, la flauta, la cítara, el laúd, el arpa, la vihuela y todos los demás instrumentos están dispuestos a postrarse adorando la estatua que he hecho, háganlo; pero si no la adoran, serán arrojados inmediatamente dentro del horno de fuego ardiente, y, ¿qué Dios los librará de mis manos? 16Sidrac, Misac y Abed-Nego contestaron: 17Majestad, a eso no tenemos por qué responder. Si es así, el Dios a quien veneramos puede librarnos del horno encendido y nos librará de tus manos…
Interleccional Dn 3: A ti gloria y alabanza por los siglos
Evangelio: Juan 8,31-42: Serán realmente libres
El evangelio de hoy nos mueve a pensar en todo aquello que nos ata, que nos hace sentir ahogados, sometidos, sin capacidad propia de decisión o elección. Nacimos para la libertad. Dios nos ha creado para la libertad. Y, con contundencia, nos da la clave para conquistarla.
En aquel tiempo dijo Jesús a los judíos que habían creído en él: Si se mantienen fieles a mi palabra, serán realmente discípulos míos, 32conocerán la verdad y la verdad los hará libres. 33Le contestaron: Somos descendientes de Abrahán y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Por qué dices que seremos libres?34Jesús les contestó: Les aseguro que quien peca es esclavo; 35y el esclavo no permanece siempre en la casa, mientras que el hijo permanece siempre. 36Por tanto, si el Hijo les da la libertad, serán realmente libres. 37Yo se que ustedes son descendientes de Abrahán; pero tratan de matarme porque no aceptan mi palabra. 38Yo digo lo que he visto junto a mi Padre; ustedes hacen lo que han oído a su padre. 39Le contestaron: Nuestro padre es Abrahán. Replicó Jesús: Si fueran hijos de Abrahán, harían las obras de Abrahán. 40Pero ahora intentan matarme a mí, al hombre que les dice la verdad que ha oído de Dios. Eso no lo hacía Abrahán. 41Pero ustedes obran como su padre. Entonces le responden: Nosotros no somos hijos bastardos; tenemos un solo padre, que es Dios. 42Jesús les replicó: Si Dios fuera su padre, ustedes me amarían, porque yo vine de parte de Dios y aquí estoy. No vine por mi cuenta, sino que él me envió. 43¿Por qué no entienden mi lenguaje?
Oración de los Fieles
Oremos al Señor para que sacuda y destierre todas las formas de esclavitud que nos retienen y nos mueva a abrazar siempre la verdad de nuestra vida, que es Cristo, diciendo: R/ Danos, Señor, la libertad de los hijos de Dios.
Oración sobre las Ofrendas
Señor Dios nuestro:
A tu Hijo Jesús no pudieron despojarlo
de su libertad interior,
incluso cuando moría en la cruz.
Danos el valor de tu Hijo
para que nuestra lealtad a la verdad,
a ti y a tus valores,
sea siempre lo bastante fuerte
como para que podamos escaparnos
de las prisiones
en las que nosotros mismos nos hemos encerrado:
que son nuestros miedos, vicios, excusas y complejos.
Acepta este nuestro sacrificio de la eucaristía,
y él que nos haga libres con la libertad
que nos trajo el mismo Jesucristo, nuestro Señor.
Oración después de la Comunión
Señor Dios nuestro:
Somos tus hijos e hijas
renacidos en Cristo por el bautismo
para ser libres.
Ayúdanos a liberarnos,
y a liberar también a nuestros hermanos y hermanas
de cualquier esclavitud pecadora
que los oprima y explote.
Danos la valentía para hablar claro
y hacer todo lo que podamos
para llevar justicia y dignidad humana a todos
con la fuerza de Jesucristo nuestro Señor.
Bendición
Hermanos: Que el Señor les dé a ustedes la gracia de seguir creyendo en la verdad del Evangelio, para que esa misma verdad las haga personas siempre libres y alegres. Para ello, que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.