Liturgia viva

El calendario litúrgico anual

La reconciliación

Description

Jueves 12 de Junio, 2025

 

Décima Semana en Tiempo Ordinario

 

LOS DISCÍPULOS SON RECONCILIADORES

 

Oración Colecta

¡Oh Dios nuestro de amor!

Infunde tan profundamente en nosotros

la mentalidad de la Buena Noticia de tu Hijo Jesucristo

que en nuestro interior no haya lugar

para la violencia, el odio o la arrogancia.

Ayúdanos a crear entre nosotros

una atmósfera de confianza y de profundo amor,

de tal modo que demos prioridad a las necesidades de los otros

y nos olvidemos de nosotros mismos en su favor.

Que sepamos perdonar sin reservas,

tal como nos enseñó Jesucristo el Señor.

 

Primera Lectura: 2 Corintios 3,15–4,1.3-6: Dios ha brillado en nuestros corazones

En la primera lectura, Pablo “pone el dedo en la llaga”, como decimos coloquialmente: “Los cristianos no nos predicamos a nosotros mismos –afirma—sino a Jesucristo, el Señor.” ¿Acaso no sabemos de lo que habla? De las tantas veces que nuestro ego, nuestro deseo de brillar personalmente en nuestras comunidades se antepone al espíritu de la mismísima Palabra de Dios. Y en lugar de irradiar luz de nuestro Salvador, la obstruimos impecablemente.

Hermanos: Hasta el día de hoy, siempre que se leen los libros de Moisés, un velo está puesto sobre el corazón de los israelitas. Pero cuando se conviertan al Señor, se les quitará el velo. Porque el Señor es Espíritu y donde está el Espíritu del Señor, ahí hay libertad. En cambio, nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos la gloria del Señor como un espejo, nos vamos transformando en su imagen, cada vez más gloriosa, conforme a la acción del Espíritu del Señor.

Por esto, encargados, por misericordia de Dios, del ministerio de la predicación, no desfallecemos. Y si nuestro Evangelio permanece velado, eso es solamente para los que se pierden, pues por su incredulidad, el dios de este mundo les ha cegado el entendimiento, para que no vean el resplandor glorioso del Evangelio de Cristo, que es imagen de Dios.

Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo, el Señor, y nos presentamos como servidores de ustedes, por Jesús. Pues el mismo Dios que dijo: Brille la luz en medio de las tinieblas, es el que ha hecho brillar su luz en nuestros corazones, para dar a conocer el resplandor de la gloria de Dios, que se manifiesta en el rostro de Cristo.

 

Salmo Responsorial 85: La Gloria del Señor habitará nuestra tierra

R. (cf 10b) La gloria del Señor habitará en la tierra.
Escucharé las palabras del Señor,
Palabras de paz para su pueblo santo.
Está ya cerca nuestra salvación
y la gloria del Señor habitará en la tierra.
R. La gloria del Señor habitará en la tierra.
La misericordia y la verdad se encontraron,
la justicia y la paz se besaron,
la fidelidad brotó en la tierra,
y la justicia vino del cielo.
R. La gloria del Señor habitará en la tierra.
Cuando el Señor nos muestre su bondad, nuestra tierra producirá su fruto.
La justicia le abrirá camino al Señor
e irá siguiendo sus pisados.
R. La gloria del Señor habitará en la tierra.

 

Aclamación antes del Evangelio

Juan 13, 34

R. Aleluya, aleluya.
Les doy un mandamiento nuevo, dice el Señor,
que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.
R. Aleluya.

 

Evangelio: Mateo 5,20-26 Todo el que esté peleado con su hermano, será juzgado

Cristo nos advierte que nuestra práctica de amor debe ir más lejos que la de los escribas y fariseos. Todo el discipulado se basa en el amor expresado en una contundente fraternidad, en el perdón, la reconciliación, la inclusión, la justicia y la no violencia.

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Les digo que, si el modo de obrar de ustedes no supera al de los letrados y fariseos, no entrarán en el Reino de los cielos. 21Ustedes han oído que se dijo a los antiguos: “No matarás; el homicida responderá ante el tribunal”. 22Pues yo les digo que todo el que se enoje contra su hermano responderá ante el tribunal. Quien llame a su hermano imbécil responderá ante el Consejo. Quien lo llame renegado incurrirá en la pena del infierno de fuego. 23Si mientras llevas tu ofrenda al altar te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, 24deja la ofrenda delante del altar, ve primero a reconciliarte con tu hermano y después vuelve a llevar tu ofrenda. 25Con quien tienes pleito busca rápidamente un acuerdo, mientras vas de camino con él. Si no, te entregará al juez, el juez al comisario y te meterán en la cárcel. 26Te aseguro que no saldrás hasta haber pagado el último centavo.»

 

Oración de los Fieles

  • Por todos nosotros, para que prioricemos siempre a las personas por encima de todo rótulo, etiqueta o pertenencia religiosa, cultural o social,
  • Por todos los cristianos. Para que nos esforcemos cada día por practicar el gran mandamiento de amarnos unos a otros como Jesús nos amó,
  • Por los que se sienten heridos por otros. Para que aprendan la difícil lección de saber perdonar de todo corazón,
  • Por nuestras comunidades. Para que busquemos juntos la voluntad de Dios, nos aceptemos benévolamente unos a otros, respetemos la libertad de cada cual y demos testimonio de la bondad del Padre,

 

Oración sobre las ofrendas

Señor, Dios nuestro,

aquí te presentamos los dones de pan y vino.

Que haya paz entre nosotros,

incluso cuando, atinada o erróneamente,

alguien tiene algo contra nosotros.

Aun cuando sea muy difícil,

queremos reconciliarnos unos con otros

motivados por aquel que nos reconcilió contigo

aun a costa de su vida,

Jesucristo, nuestro Señor ahora y por siempre.

 

Oración después de la Comunión

Señor, Dios nuestro,

que nuestras comunidades sean

espacios de profundo amor y amistad

y de reconciliación ilimitada,

porque hemos escuchado y acogido

la palabra de tu Hijo  

y hemos celebrado su sacrificio

para el perdón de los pecados

de la nueva y eterna Alianza.

Ojalá celebremos también en la vida de cada día     

la reconciliación que tú nos has enviado

por medio de Jesucristo nuestro Señor.

 

Bendición

Recordemos siempre estas palabras de Cristo hoy. Él insiste en que nosotros tenemos que ser reconciliadores: “Si cuando vas a poner tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda.” Que el Señor todopoderoso les conceda este sentido cristiano y les bendiga, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

¡Qué radical el mensaje de Jesús! No hay medias tintas, o tonos grises. Los exhorta a que, antes de buscar agradar a Dios con sus ofrendas, tienen que estar en paz con su prójimo. Invita al amor sincero en la comunidad discipular. Hoy día quizás nos parecen exageradas esas advertencias de Jesús y el consecuente castigo, pero lo cierto es que su llamado continúa vigente; de igual manera, maltratamos y ofendemos a nuestros semejantes, incluso utilizando las redes sociales, causando daños irreparables. No siempre estamos dispuestos a pedir perdón ni a la reparación del daño provocado. Creemos que, con acercarnos al confesionario semanalmente, muchas veces sin un arrepentimiento sincero, es suficiente, No podemos buscar a Dios de manera interesada, sólo buscando acallar nuestra conciencia. Sin un propósito de enmienda, de reparación del daño que hemos causado, echamos en saco roto la gracia recibida  de Dios. La invitación de este día es a la reconciliación que nos permita respetar lo sagrado de la vida en el prójimo, en toda la Creación. ¡Irradia bondad, destierra la maldad!

 

BibleClaret

Hong Kong

Síguenos

Copyright © Bibleclaret 2025. All Rights Reserved.